LUCAS SIERRA
Mejor hablar de ciertas cosas: El reglamento y los 2/3
Asumamos que, de ganar el apruebo, la Convención se organizará en comisiones y en sala. Esta es una forma de trabajo bastante común en órganos colegiados que deben deliberar, redactar y aprobar normas jurídicas. Sin ir más lejos, así se organiza el Congreso en Chile y así se organizaron buena parte de -si no todas- las asambleas constituyentes en las últimas décadas. Las comisiones se dividen según materias y proponen normas a la sala para su votación definitiva.
Después del verano, después lo que -pareciera- fue la etapa más dura de la peste, y con el plebiscito de octubre a la vuelta de la esquina; ha resucitado una discusión que estuvo viva entre el 15 de noviembre y el 24 de diciembre del año pasado. El 15 de noviembre fue el acuerdo por nueva Constitución, el 24 de diciembre se publicó la reforma constitucional que materializó dicho acuerdo. Es la discusión sobre los 2/3.
De ganar el apruebo el 25 de octubre, ¿A qué se aplicará ese alto quórum? ¿Cómo se aplicará? ¿Cuándo?
El acuerdo de noviembre dijo al respecto: “El órgano constituyente deberá aprobar las normas y el reglamento de votación de las mismas por un quórum de dos tercios de sus miembros en ejercicio.”
Por su parte, la reforma constitucional de diciembre reprodujo ese texto a la letra: “La Convención deberá aprobar las normas y el reglamento de votación de las mismas por un quórum de dos tercios de sus miembros en ejercicio.”
Es una redacción bien escueta y abierta, que reflejó la falta de un acuerdo más preciso sobre el punto en esas tensas horas de la madrugada del 15 de noviembre.
Lo único claro es que el reglamento deberá aprobarse por 2/3. ¿Pero cómo deberán aprobarse “las normas” constitucionales? Aquí radica la discusión.
Asumamos que, de ganar el apruebo, la Convención se organizará en comisiones y en sala. Esta es una forma de trabajo bastante común en órganos colegiados que deben deliberar, redactar y aprobar normas jurídicas. Sin ir más lejos, así se organiza el Congreso en Chile y así se organizaron buena parte de -si no todas- las asambleas constituyentes en las últimas décadas. Las comisiones se dividen según materias y proponen normas a la sala para su votación definitiva.
(La Tercera, 25 de Septiembre de 2020)